Silla de Seguridad para Infantes
Orientados hacia atrás
Muchos padres encuentran que los asientos de seguridad infantiles hechos para bebés son más fáciles de usar y se adaptan mejor a sus recién nacidos que los asientos convertibles. Algunos asientos para bebés también pueden utilizarse como cargadores. Muchos están diseñados con una base que se queda abrochada en el vehículo y una canastilla que puede engancharse y desengancharse de la base, para meter y sacar a conveniencia.
La silla para infantes siempre debe utilizarse orientada hacia atrás en el vehículo. La cabeza de su bebé debe quedar por lo menos una pulgada por debajo del borde superior del asiento. Un niño menor de 2 años que está muy grande para la silla de infantes debe ser transferido a un asiento convertible en la posición orientada hacia atrás.
Sillas de Seguridad Convertibles
Orientadas hacia atrás o hacia el frente
Los asientos convertibles pueden ser utilizados en ambas posiciones, orientados hacia atrás y orientados hacia el frente conforme su niño crece. Lea el manual cuidadosamente, y recuerde que los niños deben continuar viajando orientados hacia atrás hasta que alcancen el límite máximo de altura o peso especificado, antes de pasarlos a la posición orientada hacia el frente.
Sin embargo, cuando las orejas de un niño llegan al borde superior del asiento, o sus hombros quedan arriba de las ranuras superiores del asiento, es tiempo de pasarlo a un asiento combinado o a un buster. Utilice un asiento convertible hasta que su niño esté muy grande para el mismo. Los asientos convertibles protegen mejor y proporciona más apoyo..
Sillas de Seguridad 3 en 1
Orientadas hacia atrás o hacia el frente
Estos asientos se llaman 3 en 1 porque pueden ser utilizados: 1. Orientados hacia atrás, 2. Orientados hacia el frente con arnés y 3. Como un asiento buster. Utilice estos asientos orientados hacia el frente con un arnés y correa de sujeción después que su niño alcance el límite de talla para el asiento orientado hacia atrás permitido por el fabricante.
Sillas de Seguridad Combinadas
Orientados hacia el frente
Estos asientos están diseñados para ser estrictamente utilizados en la posición orientada hacia el frente con un arnés de 5-puntos y luego como un asiento buster colocado con el cinturón de seguridad. Los niños deben alcanzar los límites máximos de altura y peso especificados por el fabricante de la silla antes de ser trasladados de una silla orientada hacia atrás a una silla combinada.
Asientos Buster
Orientados hacia el frente
Una vez que su niño alcanza los límites del asiento con arnés interno, es hora de moverlo a un asiento buster. El uso del asiento buster es de extrema importancia porque los cinturones de seguridad no se posicionan adecuadamente en la mayoría de los niños hasta que miden 4 pies 9 pulgadas de altura. Durante un choque automovilístico, un cinturón de seguridad posicionado de manera inapropiada pone al niño en un alto riesgo de recibir lesiones que pueden ser severas.
Cuando niños pequeños se sientan en el asiento del auto, sus piernas son frecuentemente muy cortas para que las rodillas lleguen al borde del asiento y se flexionen cómodamente, haciendo que los niños tengan la tendencia a encorvarse o a moverse hacia adelante, causando que el cinturón del regazo se suba sobre el estómago. Los asientos buster le permiten a los niños sentarse más cómodamente, y aseguran que el cinturón de seguridad del hombro quede plano sobre el centro del pecho lejos de la cara, y que el cinturón del regazo se adapte ajustado sobre la parte superior de los muslos.
Los asientos buster más comunes están diseñados para niños que pesan entre 40 y 120 libras. No utilice un asiento buster mientras su niño pueda seguir usando un asiento con arnés orientado hacia el frente. A menudo padres mueven a sus niños de 2 ó 3 años a un asiento buster por conveniencia o porque un niño más pequeño necesita el asiento convertible. ¡Esto no es seguro! A esa edad el cuerpo de un niño no está lo suficientemente desarrollado para soportar un choque sentado en un buster.
Asientos buster sin respaldo
Los asientos buster sin respaldo pueden ser utilizados por niños que pesan al menos 40 libras. Los niños mayores pueden preferir un asiento buster sin respaldo. El niño se sienta en el asiento buster y se le coloca el cinturón de seguridad de regazo y hombro.
Asientos buster con respaldo
Los asientos buster con respaldo son una buena opción para sedans o automóviles que no tienen respaldo con cabecera o tienen el respaldo muy bajo. Ofrecen protección contra el latigazo cervical para niños más altos cuyas cabezas quedan por encima del respaldo del asiento del vehículo. Un asiento buster con respaldo es también una buena opción para un niño que se duerme en el auto. Algunos asientos buster con respaldo tienen la opción de remover el respaldo cuando su niño deja de necesitar apoyo adicional. Su vehículo deberá tener cinturones de seguridad de regazo y hombro para que su niño pueda usar un asiento buster. Nunca coloque a su niño en un buster utilizando solo el cinturón de regazo.
Sillas de Seguridad Integradas
Orientados hacia el frente
Algunos autos y vans tienen sillas de seguridad integradas para niños. Algunas de estas sillas se convierten en busters para ser utilizados con cinturón de seguridad y otros se vuelven una silla con arnés de cinco puntos. Ambos son fáciles de usar, pero ninguno puede utilizarse para niños menores de 2 años. Estos asientos únicamente pueden utilizarse orientados hacia el frente.
Sillas de Seguridad para Necesidades Especiales
Algunos niños tienen necesidades de transporte particulares que los asientos de seguridad típicos no satisfacen. Existen asientos de seguridad específicamente diseñados para mantener seguros a niños con necesidades especiales que incluyen camitas de transporte vehicular para niños prematuros o con bajo peso que puedan necesitar viajar acostados. También hay diferentes maneras de transportar niños extensamente enyesados, niños que tienen dificultad para controlar sus cuerpos o cabezas, y niños con problemas de conducta. Para mayor información, llame a Cincinnati Children’s al 513-636-7865.